Ante una emergencia lo primero es tranquilizarse. Se razona mejor con la mente despejada y además el animal herido o en estado de shock percibe nuestra aptitud. La calma es mejor consejera que la agitación.
¿Qué hacer ante una herida en un perro?
Un animal herido puede manifestar agresividad causada por el dolor. En estos casos es importante vigilar, por la propia incolumidad, y acercarse con cuidado y sin movimientos bruscos. Intentaremos tocar el animal lo mínimo para no procurarle dolor y en caso que nos deje acercar intentaremos ponerle un bozal para poder maniobrar con más seguridad, o poder acercarlo al veterinario. No intentaremos moverlo ni obligarlo a hacer movimientos que no haga espontáneamente. Sólo moveremos el animal herido según el consejo del veterinario.
A los alumnos del curso de auxiliar de clínica veterinaria les formamos para realizar primeros auxilios en mascotas, ante los principales accidentes domésticos que pueden sufrir, y que con una atención temprana pueden salvar vidas.
En caso de heridas superficiales podemos proceder a la limpieza y desinfección de la zona con agua abundante, y luego aplicar una solución de povidona yodada o clorhexidina. Lo importante es limpiarla bien para evitar el riesgo de infección. Para ello será útil afeitar la zona cortando los pelos hasta los márgenes de la herida.
Han mordido a mi perro, ¿qué hago?
Si la herida se ha producido por el mordisco de otro perro siempre se llevará el animal al veterinario, para que suministre un antibiótico, teniendo en cuenta que por su naturaleza estos tipos de herida siempre se consideran infectos.
Si la herida sangra mucho y es muy profunda la intervención veterinaria es obligatoria. En el caso que no pueda ser tempestiva, debemos proceder a disminuir el sangrado a través de un torniquete. Podemos utilizar un tejido elástico o una tira de tela. Lo ideal es una goma. Siempre se pondrá el torniquete en posición superior respecto a la herida. Lo importante es ir alentándolo aproximadamente cada diez minutos por un tiempo de entre 30 segundos y un minuto para garantizar el riego a los tejidos que al contrario podrían sufrir isquemia. Iremos repitiendo este proceso hasta llegar al veterinario.
Siempre debemos recordar que actuar ante una emergencia con unos primeros auxilios es una actuación provisional a la espera que el veterinario tome las oportunas medidas del caso. Como Auxiliar Veterinario deberás hacer una importante labor pedagógica con los propietarios de animales que vengan a la clínica informándoles de cómo actuar ante una emergencia veterinaria.
Artículo completo publicado en la revista Perros y Compañía