Puede parecer algo trivial en el trabajo de un peluquero canino, pero lo cierto es que elegir el tipo de peine o cepillo correcto para cada animal es algo fundamental. Lo es para garantizar que la mascota que llegue a la clínica esté cómoda mientras se la acicala, y lo es también para que el acabado del trabajo sea correcto y profesional en todos los sentidos. Por ello, aquí vamos a ver los tipos de peines que existen para cada tipo de perro.
El tipo de pelo
Salta a simple vista que no es lo mismo un caniche o un poodle que un bóxer. Cada animal tiene un pelo concreto que se diferencia por su longitud, su dureza o por la tendencia que tiene a acumular suciedad y a enredarse.
Así, lo primero que hay que determinar es el tipo de animal que nos llega a la clínica para poder usar el peine concreto.
Los perros de pelo corto, un chihuahua por ejemplo, tienen una baja densidad de pelo sobre su cuerpo tendiendo estos a ser un poco más duros de lo general. Lo ideal aquí es elegir un cepillo con cerdas fuertes y cortas que sea capaz de eliminar por completo la acumulación de pelo muerto que habrá en el animal y, además, que elimine de la piel partículas de piel y restos de suciedad, algo que hará que el perro salga feliz de la consulta del peluquero canino.
Asimismo, lo perros de pelo medio tienen necesidades específicas también. En la consulta, habrá que tener peines con cerdas metálicas, ya que son las más efectivas para acondicionar el pelo de estos animales. Los cepillados se deben hacer de forma exhaustiva, ya que un perro de pelo medio puede llegar a acumular bastante suciedad en su superficie.
Le toca el turno ahora los perros de pelo largo. Con estos hay que tener muy presente que necesitan tanto peinarse como un desenredo adecuado. Aquí entran en juego perros como el galgo afgano o el pastor alemán, animales que necesitan peines con cerdas muy gruesas hechas de metal para que soporten esa dureza del pelo de la que hemos hablado.
Algunos consejos para casa
Los expertos en animales de una clínica veterinaria no pueden limitar su acción a tratar al animal directamente, también deben dar consejos a los dueños de estos para que cuiden de su mascota en casa.
El peinado y cepillado son acciones fundamentales. Hay animales, como el galgo afgano del que te hemos hablado, que necesitan ser cepillados todos los días para mantener su buena imagen. Otro, como los chihuahuas por ejemplo, pueden tener suficiente con dos veces a la semana.
Lo importante es también indicar el tipo de peine que utilizarán los dueños e incluso enseñarles la forma correcta de asear a su animal.
Así, los perros podrán estar felices gracias a algo tan sencillo como el ser peinados, y es que su pelo puede ser fuente de molestias, por lo que debemos tomarnos esta tarea como algo de lo más serio.
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