Se ha detectado que, en nuestra sociedad, entre un 30 % y un 50 % de los perros padecen de algún nivel de sobrepeso o de obesidad. Por eso, es normal que el auxiliar de técnico veterinario o ATV nos de la voz de alarma por el exceso de peso de nuestra mascota, en caso de presentarlo.¿Es el sobrepeso de un perro realmente preocupante? Y, de ser así, ¿cómo evitarlo y ayudar a nuestra querida mascota a recuperar su salud?
Causas frecuentes del sobrepeso y la obesidad en los perros
En cuestiones de alimentación perros y gatos pueden comportarse de manera similar y, en casos de estrés o ansiedad, es posible que tiendan a comer de manera descontrolada. Incluso pueden adoptar comportamientos nocivos, como hurgar en el bote de basura de la casa o husmear constantemente en la calle en busca de cosas para comer. Y, cuando algo les parece apetitoso, lo comen sin titubear, actitud que nos puede llegar a sacar de quicio.
También influyen en las mascotas los hábitos de sus dueños. En general, en cuanto a la alimentación perros y dueños suelen acompasar sus horarios. Y, si el dueño suele picar entre horas y consumir golosinas y otros snacks hipercalóricos, también lo terminará haciendo el perro. Del mismo modo, una persona sedentaria transmitirá esa falta de actividad física a su perro, con la consiguiente subida de peso del animal. Tal vez el dueño no sufra de sobrepeso aún con una vida poco activa, pero la mascota será proclive a padecerlo.
Cabe aclarar que se considera sobrepeso cuando el perro pesa más del 10 % o el 15 % del establecido como peso ideal, y obesidad cuando el animal supera en un 20 % o más dicho peso.
Consecuencias del exceso de peso en los perros y medidas a adoptar para evitarlo o reducirlo
El sobrepeso y la obesidad son producto de una acumulación excesiva o anormal de grasa en el cuerpo del perro. Ello supone un riesgo que afecta su salud, ya que genera cambios en su metabolismo y favorece la aparición de diversas patologías, como distintas enfermedades respiratorias y articulares, diabetes y pancreatitis. Como se puede intuir, cualquiera de estas dolencias incidirá en una reducción de la esperanza de vida del perro.
En primer lugar, es imprescindible escuchar y seguir los consejos del veterinario y del ATV con respecto a la alimentación. El profesional indicará cuál es el tipo de pienso más adecuado y la cantidad diaria que debe ingerir, en función de la raza, la edad y las características del perro. Además, es muy importante evitar que la mascota tenga libre acceso a la comida todo el día, o darle más de una chuche al día.
Finalmente, además de prestar una gran atención a la alimentación, los perros tienen que realizar suficiente ejercicio físico. Es importante acostumbrarlos desde cachorros a realizar largas caminatas o llevarlos a parques caninos, donde puedan relacionarse y jugar con otros perros. Si no se ha hecho así, ¡ánimo, que nunca es tarde para comenzar a llevar una vida saludable!
Descubre cómo puedes convertirte en un profesional de la veterinaria, con el curso de ATV o Auxiliar Técnico Veterinario de ISED. ¡Infórmate sin compromiso! ¿A qué esperas? ¡Fórmate en lo que siempre has soñado!