A través de unas simples pautas podemos potenciar el vínculo y el liderato con nuestro perro.
Reunión tras la separación:
- Al llegar a casa ignorar al animal mientras intente llamar la atención.
- Esperar cinco minutos después de que el animal esté tranquilo para interaccionar con él.
- No hablar ni regañar al animal, solo apartarle suavemente.
- El comportamiento indeseable del animal produce una falta de atención por parte del dueño.
¿Quién protege la manada?
En momentos de peligro solo el líder indica quién es bienvenido:
- Al llegar alguien a casa, si el animal ladra, se le ignora para indicar que esa no es su función. El no debe proteger, ya que no es el líder.
- Evitar que el invitado interaccione con el animal hasta que no esté tranquilo.
- También se puede invitar al animal suavemente a otra habitación y premiarle cuando nos siga. Al salir de la habitación y volver con los demás nadie deber prestar atención al animal durante los primeros minutos.
¿Quién guía a la manada?
Es importante el momento del paseo, el líder siempre es el que guía a la manada, si el animal se cree líder irá tirando.
- El amo debe salir primero de la casa.
- El animal debe ir junto al amo, no delante.
- Usar comida como recompensa. Si el animal tira de la correa el dueño debe pararse y permanecer quieto. Cuando el animal se pare a su lado, empezaremos con alguna orden, “sentado” y comenzaremos otra vez con junto.
¿En qué orden se come?
El líder come primero:
- Practicar comer primero los dueños y después ponerle la comida al animal.
- Es conveniente instaurar una pauta correcta de comidas: darle de comer dos o tres veces al día en lugar de dejarle la comida puesta, y siempre después de la comida de los dueños. Mejor comer después de los paseos, sobre todo si come mucha cantidad y en los paseos se mueve mucho.
¿Quién es el líder?
El líder decide lo que hace la manada.
1. Practicar controles básicos y premios: el animal debe aprender a seguir algunas órdenes sencillas:
- Se le debe premiar con comida (o juegos, caricias).
- Técnica de premio por obediencia.
- Respuesta a la llamada, sentarse, dar la pata, tumbarse, ir junto al amo.
2. Ninguna interacción entre el animal y los dueños debe empezarla el animal. Si él pide algo se le debe ignorar hasta que se tranquilice. Luego le llamamos e interaccionamos con él.
3. Todo aquello que el animal quiere y todo lo que le gusta se lo tiene que ganar, “nada es gratis”. Antes de cualquier interacción positiva para el animal hay que pedirle que lleve a cabo alguna orden sencilla: “sentado”, “pata”.