Debo empezar este texto felicitando a los alumnos del curso de masaje ayurveda y del resto de cursos de terapias manuales. Mis palabras de apoyo deben ser un impulso para que sigan su camino con fuerza. Me es imposible desearlos nada mejor.
En ISED nos destacamos por dar la mejor y más variada enseñanza, y sobre todo por nuestros profesores que se esfuerzan en desplazarse a los diferentes lugares del mundo para aprender de primera mano la enseñanza directa: India, Tailandia, Canadá, Londres y un largo etc. Con ello solo quiero decir que lo más importante está dentro de cada uno y es eso lo que debemos transmitir.
El masaje ayurveda se caracteriza por tres palabras: esfuerzo, control del movimiento y equilibrio. Quien lo recibe no sabe si lo estás haciendo con las manos, los pies o combinando ambos.
Hoy en clase hemos preparado el aceite de la armonía (sésamo, joroba, mandarina, milenrama, laurel y tres secretos personales que solo sabrás si estas interesado). Hemos realizado un masaje de una hora que nos hizo sentir diferentes. Se trata de uno de los masajes más antiguos de la India, pero que se ha hecho un hueco en muchas otras partes del mundo.
Los resultados son magníficos: piel tersa, músculos relajados, sensación de crecer, relajación muscular y mental… Creo que estos ejemplos son suficientes para querer probarlo.