La osteopatía es la disciplina que estudia las patologías osteoarticulares y sus técnicas de resolución. Como tal, tiene que interesarse también por algunas que van más allá, entre las que tenemos que incorporar, por su relación directa, las emocionales y mentales.
Causas emocionales
Dentro de las funciones de las causas emocionales, intentamos estudiar, analizar y tratar de ver cómo se siente la persona y cómo le influyen dichas causas generándole un campo de información que le tendrá sujeto a una emoción en relación a unos objetos de sensación guardados en la memoria.
Causas mentales
Dentro de la función de las causas mentales, nos basaremos en un instrumento sutil que interprete los contenidos de la memoria y todo lo que percibimos en el mundo material y que nos hace percibirlo y reconocerlo como propio por nuestro cerebro-mente.
Al unir el cuerpo mental, el emocional y el físico, hacemos entender a la persona que el ser humano es la unión de tres reinos que trabajan conjuntamente. La identificación y resolución de sus patologías pasa por una integración, aceptación y toma de conciencia. Entendemos que el cuerpo humano es global, la información puede ir de la mente al cuerpo físico y solaparse con unas emociones.
De esta manera, desde la osteopatía emocional y mental, lo que deseamos es plantear la posibilidad de hacer entender a la persona que las patologías osteoarticulares pueden tener una causa mental y, desde la mente, solucionar el conflicto. De la misma manera, interpretando el lugar donde se expresa la patología física, es labor de esta técnica hacerle tomar conciencia al individuo de que toma actitudes ante el entorno y ante sí mismo que deberá reconocer y solucionar para su bienestar mental, emocional y físico. Desde este ámbito de la salud, tanto de estudio como de evaluación y tratamiento, cumpliríamos la faceta de atender a la persona como una globalidad.
De acuerdo a cómo el individuo gestiona su relación con el medio, irá almacenando en forma de emoción y en la memoria corporal creándole una patología que le impedirá tener un buen manejo de su relación con el entorno, lo cual le producirá diversas tensiones (nerviosa, visceral, osteoarticular y de sus cadenas musculares), que le impedirán tener una postura corporal estable y en equilibrio, lo que, en algunos casos, le llevará a la necesidad de realizar un reposo.
Que el sujeto se sienta liberado de estas tensiones, ya sean físicas, emocionales o mentales, será la meta del autoconocimiento consciente de la persona.