A menudo nos encontramos nosotros mismos o a algún conocido con molestias en el cuello, rigidez e incluso dolor en la zona. Esta rigidez en el cuello suele ir acompañada de un espasmo de los músculos relacionados con la estática y el movimiento de esta articulación. Dicha falta de movilidad nos impide realizar con normalidad nuestras labores cotidianas y nos limita en nuestro trabajo.
Una experiencia común suele ser despertarse con un cuello rígido y dolorido, algo que suele ser repentino. Normalmente, el cuello adopta una posición antiálgica para evitar el dolor.
Una cervicalgia aguda, una tortícolis o una rigidez del cuello es en sí una contractura de los músculos del cuello, a menudo acompañada por la rigidez de la articulación de las vértebras cervicales.
Síntomas más frecuentes de la rigidez de cuello
- Dolor, generalmente ubicado en el medio o en el costado del cuello. Este dolor puede ser irradiado al brazo.
- Pérdida de movimiento, con una inclinación hacia adelante del cuello y una rotación desde el lado del dolor, generalmente acompañado de movimiento que agravan el dolor.
- Espasmo muscular. El acortamiento de los músculos del cuello asociados que nos impiden el movimiento normal.
- También puede ir acompañado de mareos, en algunos casos.
En el caso de un dolor agudo, mareos, dolor irradiado o algún antecedente de accidente o traumatismo, corresponde al médico evaluar y diagnosticar la lesión y valorar la necesidad o no de un tratamiento de los tejidos blandos afectados. Para ello, el quiromasaje cuenta con diversas técnicas de masaje y estiramientos suaves.
Cómo tratar la rigidez de cuello
En el Centro Superior de Estudios, ISED, dentro del curso de Quiromasaje y otros cursos de especialización en terapias manuales, formamos a nuestros alumnos desde un nivel básico, dotándolos de las diferentes herramientas y conocimientos necesarios para poder realizar un tratamiento lo más eficaz posible, encaminado a la mejoría del bienestar de la persona con la rigidez cervical.
Mediante el aprendizaje de maniobras básicas, desarrollamos la habilidad manual necesaria para poder trabajar eso tejidos blandos. Con el aprendizaje de Anatomía y Fisiología básica del cuerpo humano, trasladada después mediante las prácticas en las aulas del masaje de las diferentes partes del cuerpo y el trabajo de palpación y diferenciación de tejidos, podemos abordar la recuperación del espasmo muscular asociado a esta rigidez, así como la mejora de la movilidad de la articulación del cuello.
Por ultimo, cabe recordar la importancia de encontrar la causa de esa rigidez, basada en nuestra experiencia, conocimientos y proporcionar también ejercicios que pueda ayudar para hacer en casa. Así como también promover las actitudes a evitar que tengan que ver con la causa, como por ejemplo malas posiciones en el trabajo, situarse frente al ordenador, almohadas inadecuadas, leer o ver la televisión en la cama, etc.
Conviene no olvidar que el estrés y la tensión emocional suelen acompañar a esta tortícolis o rigidez cervical.