Cuando las personas piensan en el fitness lo primero que se les viene a la cabeza es entrenamiento físico, con ejercicios dinámicos e intensos como correr o levantar pesas, y en una dieta saludable. Sin embargo, muchas veces se deja a un lado aspectos psicológicos y la motivación, estos dos factores son indispensables para que las personas puedan entrenar de forma constante y exitosa.
El fitness engloba a una serie de actividades que requieren un gran esfuerzo físico, pero además mucha disciplina y motivación. Por esto, en este artículo te contamos cómo interviene la psicología en el fitness y te aconsejaremos para que puedas lograr tus objetivos físicos sin descuidar tu salud mental, para así obtener un bienestar integral.
¿Cuáles son los beneficios del fitness?
El objetivo del fitness es lograr una salud en óptimas condiciones por medio de la práctica regular de ejercicios -de fuerza, equilibrio, agilidad, flexibilidad y resistencia- y cuidando la alimentación. Esto conlleva varios beneficios:
- Mejorar la capacidad cardiovascular y reducir el riesgo de enfermedades de este sistema.
- Fortalecer al sistema musculoesquelético, mejorar la flexibilidad, aumentar la fuerza, estimular el desarrollo muscular y vigorizar la salud ósea. Todo esto ayuda a prevenir lesiones.
- Regula el metabolismo y se queman calorías.
- Ayuda a prevenir enfermedades y aumenta la energía.
- Combatir el estrés y la ansiedad
- Aumentar la autoestima.
Técnicas de motivación para los clientes
Un buen instructor fitness debe ayudar a que sus clientes se sientan motivados. La motivación es el impulso y fuerza que nos permite iniciar o sostener una acción, sin ella es muy difícil que se mantenga el interés en llevar una vida fitness, por esto los entrenadores deben apoyar y motivar a las personas y tener en cuenta este factor al diseñar el plan de entrenamiento y a la hora de darles indicaciones o consejos sobre su progreso.
Las técnicas de motivación que usan los instructores de fitness suelan ser:
- Establecer objetivos realistas y específicos: es importante que las personas tengan claro qué quieren lograr con su entrenamiento, para esto deben tener metas claras que sean desafiantes, pero realistas y mensurables.
- Escuchar a los clientes e involúcralos en la toma de decisiones: los instructores tienen que escuchar y valorar el feedback, incluir las sugerencias y preferencias de las personas a las que instruyen ayuda a que el entrenamiento sea más ameno para ellos y aumenta su compromiso y sentido de responsabilidad con los objetivos y los planes pactados.
- Poner metas a corto y largo plazo: de esta forma los clientes se van sintiendo satisfechos al ver que cumplen con el plan diseñado.
- Dar feedback positivo y constante: es vital que los instructores reconozcan la dedicación y el esfuerzo de sus clientes y se lo hagan saber (puede ser con palabras o con premios), también deben celebrar sus logros y mejoras. De esta forma, las personas se sentirán valoradas y tendrán mayor motivación para continuar con el entrenamiento.
- Crear rutinas creativas: el fitness no debe ser aburrido o sentirse como una obligación, por esto es importante que los entrenadores incluyan la diversión, con nuevas rutinas, elementos y equipos. Además, es positivo fomentar la interacción social con otro cliente e incluso con otros instructores.
- Fomentar un ambiente agradable y seguro: los clientes deben sentirse respetados, cómodos y también con la libertad de expresar sus ideas y opiniones.
Superación de barreras mentales en el ejercicio
En muchas ocasiones el mayor impedimento para progresar o incluso empezar en el fitness no se trata de la condición física sino de alguna barrera mental. El miedo, la vergüenza, el negativismo o creencias limitantes frenan cualquier avance en el entrenamiento y es posible caer en una vida sedentaria si estas actitudes negativas no son controladas y superadas.
Las barreras mentales más comunes en el ejercicio o el fitness son:
- Falta de motivación.
- Objetivos no realistas y frustración por no cumplirlos.
- Miedo al fracaso o a las críticas.
- Procrastinación.
- Baja autoestima.
- Perfeccionismo o demasiada exigencia.
- Resistencia al cambio o poca capacidad de adaptación.
- Impaciencia y falta de constancia.
Para la superación de barreras mentales en el ejercicio no solo es importante contar con un buen instructor, también se requiere que las personas por su cuentan sigan unas sencillas recomendaciones:
- Ser proactivo y organizado.
- Atreverse a probar e intentar nuevas cosas.
- Ser persistente, paciente y constante.
- Ser positivo y optimismo.
- Disfrutar del proceso y auto reconocer el esfuerzo.
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Aspectos psicológicos del entrenamiento
Como mencionamos anteriormente, el entrenamiento no solo implica el cuerpo y un esfuerzo físico, sino que el aspecto mental es vital debido a que influye directamente en el rendimiento y salud de las personas.
Los aspectos psicológicos del entrenamiento influyen a la hora de realizar ejercicios. Sin embargo, realizar fitness a su vez tiene un impacto positivo en la salud mental y ayuda a mejorar o aumentar:
- La motivación.
- Autoestima.
- Confianza.
- El humor.
- La memoria.
- Cohesión y comunicación con otras personas.
- La creatividad.
- La concentración.
- También disminuye: la ansiedad, estrés y depresión.
El fitness es una actividad que mejora la salud de forma integral de las personas, por esto es importante contar con un Instructor de fitness capacitado y profesional para ayudar a sus clientes. Si te interesa el mundo del entrenamiento y del bienestar ¡No lo pienses e inscríbete en nuestro curso de ISED!