Muchas personas acostumbran hacer ejercicio físico junto con sus mascotas. Dar largos paseos por la montaña o la playa, correr a pie o en bicicleta, jugar con pelotas o frisbee, son actividades importantes que por un lado mejoran la condición física de toda la familia y, por otro, estimulan también la actividad mental, favoreciendo el equilibrio y el bienestar.
Muchas personas hasta comparten sus bebidas y barritas energéticas con sus perros. Y es que un perro “atleta” tiene necesidades diferentes que deben ser atendidas si no queremos que el ejercicio se transforme en un factor negativo. Según el Dr. Joseph Wakshlag, profesor de nutrición clínica de la Cornell University College of Veterinary Medicine in Ithaca (Nueva York), un perro puede ser considerado atleta si le sometemos a ejercicio físico intenso de forma regular, como por ejemplo correr al menos 30 minutos. Algunos consejos útiles nos ayudarán a compartir de la forma correcta el tiempo libre con nuestra mascota:
- No todos los perros pueden ser aptos para hacer ejercicio intenso: algunos perros, como por ejemplo las razas braquicefálicas, pueden tener problemas debido a la conformación de su cráneo y paladar que no permite un regular intercambio y refrigeración del cuerpo. Otros tienen un tamaño pequeño que no les permite seguir un ejercicio físico intenso.
- Los perros utilizan la grasa como fuente primaria de energía en condiciones de ejercicio intenso al contrario de los humanos que utilizan el glicógeno, un carbohidrato almacenado en el hígado. Esto es, en parte, debido a la mayor cantidad de mitocondrias en las células, las estructuras que generan energía. Por esta razón no tiene sentido compartir alimentos energéticos con ellos. Mejor aumentar ligeramente el contenido de grasa de la dieta. Los piensos normales ya tienen un porcentaje satisfactorio de grasa, si el perro corre 10 minutos dos o tres veces por semana. Pero si cada día corre 10 kilómetros debemos pensar en controlar su dieta.
- Los perros necesitan una base proteica derivada de carne para mantener su actividad física. Estos es fundamental para la integridad de su sistema musculo-esquelético. Un ejemplo es que los perros alimentados con proteínas derivadas de la soja experimentan alteraciones musculares significativamente mayores que los alimentados con proteínas derivadas de la carne.
- La hidratación del perro es fundamental. Aunque los perros no suden, también pierden líquidos durante el ejercicio. Por otra parte, al beber se rehidratan más eficazmente que los seres humanos. Por esta razón no necesitan que les demos bebidas energéticas con sales minerales. Además estas han demostrado tener cierto efecto estresante sobre el aparato gastro-intestinal.
Los perros no son humanos: sus mecanismos fisiológicos así como sus necesidades nutricionales y físicas son diferentes, en general, pero también dependen del tamaño y raza del animal. Pidamos consejo al veterinario sobre qué tipo de ejercicio se adapta mejor a nuestro perro.
Un comentario
La vida sana también puede y debe incluir a nuestra mascota, gracias por compartir tan buen post con nosotros, debemos considerar una dieta adecuada para el ejercicio físico, cuidar la alimentación de nuestro can es sumamente importante, quiero contribuir sobre el tema a través del siguiente post.