Lo cierto es que el trabajo de preparación es duro por el tiempo que lleva, como también ocurre con la preparación del aceite medicado que comprobaron lo que cuesta prepararlo. En total, tardamos más de cinco horas en preparar el aceite. Su olor a planta fresca y la textura en el cuerpo no muestra diferencia alguna con los que usan un aceite normal sin ningún preparado.
Las pindas que prepararon los alumnos estaban muy bien elaboradas, no sólo con las manos, puesto que el corazón ayuda a trabajarlas con armonía para el disfrute del cliente.
Carlos Romero
Profesor del Curso de Masaje Ayurveda de ISED