Es normal que pienses en las salidas laborales si estás a punto de elegir cuál será tu profesión. Aquí queremos hablarte de las que tienes si eliges el puesto de auxiliar de pediatría como el tuyo propio, por lo que te interesa todo lo que vamos a contarte a continuación.
La situación del sector
Según reconocen organismo como la propia OIT o la OMS, en los países desarrollados hay una demanda de profesionales sanitarios que no se llega nunca a cubrir. Por ello, este es uno de los sectores más interesantes a la hora de dar un impulso a tu futura carrera laboral.
No te van a faltar sin duda las oportunidades de ir creciendo como auxiliar de pediatría. Es más, es complicado que llegue a faltarte el trabajo en cuanto consigas tu título y te incorpores al mercado laboral. Además, si lo tuyo es trabajar con niños, conseguirás hacer lo que te gusta y echar una mano a los pequeños sin tener que preocuparte de tener una formación que no te dé estabilidad laboral.
En cuanto a los sueldos a los que vas a optar, estos variarán del lugar en el que trabajes y de la región. No obstante, puedes alcanzar sin demasiados problemas nóminas que estén en torno a los 1500 euros mensuales, aunque, como te decimos, todo depende de las condiciones exactas.
¿Cuáles son las funciones de un auxiliar pediatría?
¿No sabes cuáles son las funciones exactas que recaerán sobre ti el día que te conviertas en auxiliar de pediatría? Te las explicamos. La más básica de todas será la de servir de apoyo al médico pediatra cuando este se encuentre trabajando con niños, por lo que recibirás directamente las órdenes de este profesional.
Asistir en partos es otra de las tareas que suelen ser cotidianas para los auxiliares y una de las más gratificantes, y es que hay pocas experiencias mejores que ayudar con nuevo nacimiento. También podrás colaborar en el cuidado de niños enfermos en hospitales y encargarte del seguimiento de los pequeños a lo largo de todo el tratamiento que el médico haya diseñado para ellos.
¿Cuáles son las principales salidas laborales?
Teniendo claro todo lo anterior, lo cierto es que hay a tu alcance muchas opciones para conseguir trabajar como auxiliar de pediatría. La primera y más evidente es la de formar parte de un equipo médico en una consulta pública o privada dedicada al tratamiento de niños.
Pero la anterior no es la única. Por ejemplo, lo grandes centros de ocio infantil, como ludotecas o parques de atracciones, cuentan cada vez en mayor número con expertos en pediatría para atender a los más pequeños, por lo que ahí tienes otra vía por la que crecer laboralmente.
Y lo mismo sucede con colegios y guarderías, campamentos o centros de menores, espacios todos ellos que van a requerir la presencia de un auxiliar como tú.
En definitiva, optar por un curso de auxiliar de pediatría puede abrirte las puertas de una futuro laboral brillante en el que harás lo que te gusta de verdad.
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