El boldo es una planta medicinal proveniente de Sudamérica cuyos orígenes se remontan a la época precolombina y que hoy en día es usada por los naturópatas para curar determinadas molestias principalmente relacionadas con los trastornos del aparato digestivo además de tener propiedades antisépticas y servir de analgésico natural.
Propiedades y usos del boldo
Las hierbas boldo son utilizadas en numerosos tratamientos de naturopatía ya que su principal propiedad es la de aliviar el estreñimiento y ayudar a la expulsión de gases. Por lo que es altamente recomendado para personas que sufran problemas digestivos como cólicos, empachos o flatulencias. Debido a sus propiedades diuréticas es muy bueno también para depurar tanto el hígado como las toxinas de la sangre, los naturópatas lo recomiendan especialmente a los pacientes que sufran de cistitis, infecciones o riesgo de padecer cálculos biliares.
Otro de los usos más populares de las hierbas boldo es el de favorecer el sueño y la relajación por su capacidad para actuar sobre el sistema nervioso. Estas propiedades sedantes permiten que el cuerpo se relaje y, debido a que su composición incluye la presencia del cineol, se puede aplicar por vía externa no solo para descongestionar el pecho sino también para aliviar los dolores reumáticos.
Gracias a su agradable aroma a limón y al sabor dulce de su fruto, el boldo también se utiliza con fines gastronómicos sobre todo en la elaboración de bebidas que favorecen la digestión. Sus frutos pueden tomarse tanto crudos como cocinados y sus aceites esenciales se usan en la elaboración de perfumes e insecticidas. Los taninos que contiene su corteza son un potente colorante además de tener propiedades antioxidantes que disminuyen el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.
En naturopatía las hierbas boldo se preparan normalmente a modo de infusión bien emulsionando directamente unas cuantas hojas secas o en prácticas bolsitas ya preparadas para su consumo.
Contraindicaciones de las hierbas boldo
Como cualquier otra hierba medicinal, antes de comenzar cualquier tipo de tratamiento conviene ponerse en manos de un profesional de la naturopatía para informarse acerca de las posibles contraindicaciones que pueda presentar el consumo de ciertas hierbas, así como de sus interacciones con otros medicamentos.
La primera precaución a tener en cuenta es que su uso no debe prolongarse generalmente más allá de las cuatro semanas. Es recomendable recurrir al boldo para tratar una dolencia puntual, pero este no debe consumirse sistemáticamente durante largos periodos de tiempo. Aquellas personas con colon irritable o tendencia a padecer diarreas no deben ingerirlo debido principalmente a sus propiedades coleréticas y carminativas.
Las hierbas boldo tampoco son recomendables para personas que estén tomando medicación anticoagulante pues la cumarina, propiedad presente en el boldo actúa como un potente anticoagulante natural que incrementa el riesgo de sufrir hemorragias. Las mujeres embarazadas deben tener un especial cuidado porque consumido en dosis altas puede resultar abortivo, no se aconseja tomarlo durante el periodo de lactancia ni en niños menores de doce años.
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