El pilates es un método de entrenamiento físico en el que se trabaja el desarrollo de la flexibilidad, la fuerza y la resistencia. También se le da mucha importancia al control del cuerpo y la respiración para fortalecer la mente, cuerpo y espíritu.
Para que una sesión de pilates sea exitosa se requiere que la ejecución de los movimientos y ejercicios sean controlados y precisos. Por lo tanto, se necesita mucha concentración, coordinación y la guía de un instructor (en personas que están iniciándose en la práctica).
Un diagrama de clases de pilates permite estructurar, planificar y ejecutar este método de forma correcta, consiste en una herramienta de organización para poder programar todos los ejercicios que se realizarán en las sesiones.
¿Cómo estructurar una clase de Pilates?
Una manera muy útil y eficaz de estructurar una clase de pilates es realizando un diagrama, para esto se debe:
- Definir los objetivos: es necesario que cada clase tenga definido lo que se quiere trabajar en ella, para así orientar el trabajo de forma más práctica, realista y con mejores resultados. Siempre debe hacerse teniendo en cuenta a qué alumnos va dirigida.
- Elegir los ejercicios: dependiendo de los objetivos planteados se deben seleccionar los ejercicios cuyo enfoque deben ser los mismos. Por ejemplo, realizar planchas con la pierna levantada para fortalecer el Core -músculos del abdomen- y a su vez ganar estabilidad y resistencia.
- Planificar la secuencia e identificar el tiempo: el instructor debe coordinar cómo serán las secuencias, normalmente se empieza con ejercicios suaves y poco a poco se va aumentando la intensidad. Variar el tipo de ejercicio es recomendable para trabajar con distintos músculos y para que sean más entretenidas las secciones. Además, se debe seleccionar cuál será el tiempo para ejecutar cada ejercicio.
- Especificar el uso de accesorios: en algunas sesiones de pilates se utilizan distintos accesorios, estos deben ser parte del diagrama.
- Corregir la postura: en el plan de las clases también debe incluirse un tiempo para las correcciones posturales.
- Elegir los estiramientos: al finalizar cada clase se debe estirar y relajar todos los grupos que se trabajaron en la sesión.
Luego de definir todo lo descrito anteriormente se puede estructurar una clase de pilates con éxito. Lo importante es que sea fácil de entender y seguir tanto para los instructores como para los alumnos.
Beneficios del pilates
- Ayuda a fortalecer los músculos.
- Aumenta la flexibilidad.
- Mejora la resistencia y la fuerza.
- Disminuye el estrés y mejora la autoconciencia corporal.
- Aumenta la coordinación y el equilibrio.
- Reduce la ansiedad.
- Mejora la postura corporal.
- Ayuda a respirar de forma consciente.
- Es una excelente opción de entrenamiento.
- Es eficaz para tonificar.
- Sirve para rehabilitación de ciertas afecciones como dolor de espalda.
- Reduce el riesgo de sufrir lesiones y ciertas enfermedades.
- Lo pueden realizar personas de cualquier edad, siempre con la guía y el apoyo de un instructor capacitado.
Consejos y pautas para organizar la sesión de Pilates
- Objetivos planteados y resultados: los objetivos tienen que estar alineados con los resultados que se desean obtener, estos deben ser realistas y son la base para diseñar la clase de pilates.
- Tiempo disponible: lo más recomendable es que como mínimo las sesiones duren una hora y que se repitan tres veces a la semana. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que esto no siempre es posible y se debe poder adaptar a las opciones disponibles, sin dejar las clases incompletas o que el entrenamiento sea deficiente.
- Condición física: es de vital importancia tener en cuenta el estado actual y la condición de las personas, evaluando las actividades que realizan de forma frecuente y en qué trabajan. Estos factores permiten que las clases se adapten a las necesidades, exigiendo a los participantes, pero sin correr el riesgo de sobrecargas musculares o de sufrir lesiones.
Un factor a considerar es que existen diferentes tipos de pilates como el funcional, el stretching, el terapéutico, el mat y el reformer. Lo recomendable es que cada persona investigue el que más le interesa y el que mejor se adapte a sus necesidades. Es necesario que el instructor les indique a sus alumnos en qué consiste cada tipo y así los participantes tendrán expectativas realistas, lo que facilitará la organización de las clases.
Las claves de una sesión de Pilates
- Calentamiento: las clases deben iniciarse con movimientos suaves y simples, pero que permitan que el cuerpo se caliente y esté listo para avanzar con los otros ejercicios.
- Ejercicios: es la parte más activa de la sesión de pilates, en ella se ejecutan los movimientos seleccionados en lo que se desea trabajar: fuerza, flexibilidad y/o resistencia.
- Variaciones: es necesario que en la estructura de la sesión de pilates se dé espacio a la posibilidad de hacer cambios para adaptarse a los participantes de forma segura. Además, se recomienda variar la intensidad de los ejercicios.
- Respiración: en todo momento es imprescindible cuidar la respiración para que se haga de forma correcta.
- Estiramientos: así como el calentamiento es importante al iniciar, los estiramientos al terminar la sesión son vitales para ayudar a relajar y disminuir las tensiones en el cuerpo.
- Creatividad y dinamismo: las clases de pilates pueden ser muy diversas: incorporando accesorios, trabajando en diferentes posiciones y variando los ejercicios. Esto ayuda a que las personas se mantengan interesadas y motivadas a seguir participando en las sesiones.
Una buena sesión de pilates es la que permite a sus alumnos aprender, divertirse, entrenar, fortalecerse y mejorar su condición física y todo esto empieza con la correcta diagramación de las clases.
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